miércoles, 27 de junio de 2012

Todo sigue igual

Después de varios días de silencio, vuelvo a esta columna de actualidad y veo que todo sigue igual. La crisis económica sigue imparable, el Gobierno no dice la verdad, cambia de criterio continuamente y busca soluciones (?) fáciles consistentes en hacer pagar a los ciudadanos más impuestos, más medicinas y rebajar a los funcionarios  sus salarios. 
No parece que las ideas brillen porque siempre se llega a la misma solución: desplumar al que no puede protestar.
Nadie se acuerda de recortar gastos, ni de exigir responsabilidades a los anteriores gobernantes: ¿que responsabilidad se exige a Zapatero, Solbes y Salgado? Ninguna. Mientras tanto, tenemos que soportar  que Zapatero acumule dos sueldos mensuales de 6.000 € como Consejero vitalicio del Consejo de Estado y como ex-Presidente del Gobierno. ¿Pero no habíamos quedado que no se podían percibir dos sueldos públicos? ¡Ah! que eso solo es para ciertas personas, como fue mi caso, que siendo Catedrático de Derecho Civil por oposición y Juez, fui lanzado a la calle en una de ellas, sin indemnización alguna.
¿Qué país es este que mantiene prebendas vitalicias y organismos sin sentido donde se cobijan ex-politicos y amigos? Es urgente cortar de raíz tanto organismo innecesario a nivel estatal y autónomico: Consejo de Estados, Consejos Consultivos, Defensores de los Ciudadanos, Tribunales de Cuentas, asesores inumerables e incontables. Cada día se hace más imperiosa la necesidad de un golpe ciudadano de protesta colectiva, para exigir responsabilidades reales a los que antes y ahora debieron cuidar de los intereses colectivos.
¿Y qué decir del Consejo General del Poder Judicial? A Divar le obligan a irse por hacer lo mismo que han venido haciendo todos los Vocales del Consejo desde el año 1985, sin que nadie hubiese protestado. Menos mal que las penas con pan son más llevaderas y que seguirá cobrando durante dos años su sueldo. Por otra parte, no tengo palabras para expresar lo que me sugiere el espectáculo del Presidente en Funciones, ¿cómo puede la carrera judicial tener a este personaje a su frente, aunque sea durante poco tiempo?
Hay momentos en que me alegra pensar que es poco el tiempo que me queda por soportar esta situación de los organos de representación de los jueces.

jueves, 7 de junio de 2012

Derecho a la huelga y cumplimiento de la ley

Lleva Asturias varios días en los que se suceden los conflictos laborales -huelga de la minería y del transporte por carretera- en los que entran en permanente colisión los derechos de los trabajadores y los del resto de los ciudadanos, que contemplan incredulos cómo la autoridad competente no hace cumplir el mandato de las leyes. Sorprende que ante imágenes como la de un antiguo y eterno lider sindical minero prendiendo fuego a una barricada en una autopista -con el consiguiente daño tanto a las personas que por allí circulaban, a las que se les impide llegar a su destino, como a la propia calzada, que sufre graves deterioros que abonaremos entre todos- nadie haya tomado la decisión de aplicar la ley. En concreto, me refiero al Delegado del Gobierno en la Comunidad y al Fiscal Jefe, porque ambos debieron actuar porque se estaba -y sigue así- cometiendo un delito de desordenes públicos que está previsto en el art. 557.1 del Código Penal. Es un delito público -cuya existencia no pueden desconocer dada su publicidad- que tienen la obligación de denunciar y perseguir. ¿Hasta cuando vamos a seguir así?
España es un país peculiar que se caracteriza por sus contradicciones básicas; así sucede con el ejercicio del derecho a la huelga, que está reconocido como derecho fundamental en el art. 28.2 de la Constitución -que es del año 1978- y sin embargo su  regulación está en  un RDL de 4 de marzo de 1977, es decir, se regula por una norma anterior a la propia Constitución. ¿Qué ocurre para que en 34 años de vigencia de la Constitución ningún Gobierno haya sido capaz de promulgar una ley que regule de forma ordenada -contemplando los derechos de los trabajadores y los del resto de los ciudadanos- el derecho de huelga?