Ayer, lunes 23 abril del 2018, he presentado en el Registro General de la Universidad una instancia dirigida al Rector en la que acogiéndome al Derecho de petición regulado por la ley orgánica 4/2001 de 12 de noviembre, solicito que por la Universidad en dos sitios( uno de ellos a la puerta de la Biblioteca principal del edificio de la calle San Francisco) visibles se coloquen sendas lapidas, estelas o cuadros en los que se recoja la memoria histórica de cómo quedó, en octubre de 1934, arrasado el edificio y destruidos todos los libros de la Biblioteca.
Con la colaboración de la Oficina de Prensa del TSJA he enviado a la Nueva España una Carta Abierta dirigida al Rector de la Universidad en la que le anuncio la presentación de dicha Petición. Espero que se publique esta misma semana.
Este Rector- a quien no conozco personalmente- no para de salir en la prensa y de hacer declaraciones con muchas de las cuales discrepo; ahora promueve una Comisión que decida sobre la supresión de todos los vestigios del franquísmo que queda en el edificio histórico. Tema que como es conocido preocupa mucho a los profesores y a los vecinos de Oviedo. En particular se trata de borrar lo que hizo Sabino Álvarez Gendin por la Universidad después del 36.
Las conclusiones de tal comisión son fáciles de imaginar.
Como estoy harto de que lo ocurrido antes de 1936 no exista para los llamados "progres" y no quiero que hagan lo que quieren sin oposición alguna, voy a incordiar todo lo que pueda para tratar de que lo ocurrido en el 34 no se olvide por los ovetenses actuales y los futuros.
La Universidad tiene tres meses para contestarme, si no lo hace, pleito .
